El año que viene se actuará en las presas de Zubiaga y Olea; con las de Olabarrena e Igarreta se realizara un ejercicio mas complejo y pausado.
En las presas de Zubiaga y Olea se actuará según el proyecto Merlín en 2025, mientras que con las de Olabarrena e Igareta se realizará un ejercicio más complejo y cuidado, tal y como se planteó en el proceso participativo.
En los últimos años se ha generado un gran revuelo en Soraluze con motivo del proyecto Merlín de restauración del ecosistema del río Deba. Con el objetivo de dar respuesta a esa situación, el ayuntamiento puso en marcha en otoño del año pasado un proceso participativo. Con las conclusiones sacadas a partir del debate el ayuntamiento planteó una hoja de ruta para cada presa:
- Conformidad con el planteamiento del proyecto Merlin para las presas de Zuloaga y Olea.
- La propuesta de actuación de las presas de Olabarrena e Igareta necesita mayor profundidad.
Precedentes
La cuestión de las presas fue puesta en el centro del debate por el proyecto Merlín, pero ya en el plan urbanístico aprobado en 2017, el PGOU, se hace referencia a la recuperación del río y tras plantear sus intereses, la Agencia URA, la Diputación Foral de Gipuzkoa y el Ayuntamiento de Soraluze acordaron lo siguiente:
- Proteger el aspecto urbano del río, consolidando las presas, aunque su altura disminuya para alcanzar los siguientes objetivos:
- Reducir el riesgo de inundación.
- Facilitar el paso de fauna.
- Mantener las láminas de agua.
Desde entonces, el Ayuntamiento se ha comprometido a rebajar la altura de las presas para hacer factibles los desarrollos urbanísticos estratégicos previstos en los márgenes de los ríos del municipio, ya que la Agencia URA planteó la necesidad de reducir el riesgo de inundación. De hecho, tanto Olaldea como el entorno del SAPA son proyectos estratégicos para el futuro de Soraluze y el compromiso de rebajar la altura de las presas en el PGOU para poder desarrollarlo fue la decisión correcta.
Proceso y toma de decisión
El Ayuntamiento ha realizado en los últimos meses un esfuerzo especial por ser coherente tanto con lo recogido en el PGOU como con las conclusiones del proceso participativo; ha reflexionado sobre las posibilidades y riesgos que conllevaría la adaptación de las presas.
Si bien la adaptación de las presas podía representarse como un ejercicio simple, el ayuntamiento ha llegado a la conclusión de que corresponde realizar un ejercicio más complejo y cuidado con las presas de Olabarrena e Igareta; así se manifestó también en el proceso participativo. Además de reducir el riesgo de inundabilidad y ganar permeabilidad, se incorporaría un proyecto para preservar la biodiversidad de las nuevas márgenes de los ríos, poner en valor el patrimonio material, tener en cuenta el impacto de la lámina de agua en el paisaje fluvial y recoger los proyectos municipales para acercar el río a los soraluzetarras (la transformación en SAPA, nueva grada prevista en la Plaza Zaharra y las actuaciones planteadas en torno a Olabarrena).
En los próximos meses varios departamentos de la Diputación y el ayuntamiento de Soraluze se involucrarán de lleno en esta actuación. Aunque todavía no se pueden concretar los plazos de estas acciones, las actividades vinculadas al proyecto Merlín deben estar finalizadas para el verano de 2025, por lo que se actuará en 2025 en las presas de Zubiaga y Olea. Las actuaciones de Olabarrena e Igareta quedarán fuera del proyecto Merlín y tendrán otros plazos.
El ayuntamiento de Soraluze quiere agradecer a los departamentos de la Diputación su voluntad de colaboración y consenso. El Ayuntamiento espera también que los trabajos de los próximos meses den buenos frutos, y que tomando en consideración las conclusiones del proceso participativo se complete un proyecto sólido para conseguir un río más habitable y disfrutable para todos y todas las soraluzetarras.
Si bien la adaptación de las presas podía representarse como un ejercicio simple, el ayuntamiento ha llegado a la conclusión de que corresponde realizar un ejercicio más complejo y cuidado con las presas de Olabarrena e Igareta; así se manifestó también en el proceso participativo. Además de reducir el riesgo de inundabilidad y ganar permeabilidad, se incorporaría un proyecto para preservar la biodiversidad de las nuevas márgenes de los ríos, poner en valor el patrimonio material, tener en cuenta el impacto de la lámina de agua en el paisaje fluvial y recoger los proyectos municipales para acercar el río a los soraluzetarras (la transformación en SAPA, nueva grada prevista en la Plaza Zaharra y las actuaciones planteadas en torno a Olabarrena).
En los próximos meses varios departamentos de la Diputación y el ayuntamiento de Soraluze se involucrarán de lleno en esta actuación. Aunque todavía no se pueden concretar los plazos de estas acciones, las actividades vinculadas al proyecto Merlín deben estar finalizadas para el verano de 2025, por lo que se actuará en 2025 en las presas de Zubiaga y Olea. Las actuaciones de Olabarrena e Igareta quedarán fuera del proyecto Merlín y tendrán otros plazos.
El ayuntamiento de Soraluze quiere agradecer a los departamentos de la Diputación su voluntad de colaboración y consenso. El Ayuntamiento espera también que los trabajos de los próximos meses den buenos frutos, y que tomando en consideración las conclusiones del proceso participativo se complete un proyecto sólido para conseguir un río más habitable y disfrutable para todos y todas las soraluzetarras.