Excavación del dolmen de Gizaburua
En el marco del plan de acción de 2017 para conservar y poner en valor la Ruta de los Dólmenes, la Sociedad de Ciencias Aranzadi comenzará el próximo lunes, 12 de junio, con los trabajos de excavación y reinterpretación del dolmen de Gizaburua.
El objetivo de la investigación es conocer la estructura arquitectónica y el contenido del Dolmen de Gizaburua, para su posterior rehabilitación.
En el pasado ejercicio, el correspondiente al 2016, los trabajos de excavación llevados a cabo por Aranzadi arrojaron información valiosa en torno al elemento de Gizaburua.
Según afirma Aranzadi, hasta entonces se desconocía que dicho elemento fuese un dolmen. Se creía que era un simple túmulo, esto es, un conjunto de piedras que sirvió en su época para la sepultura. Pero no se sabía qué tipo de tumba escondía el elemento. Gracias a las labores de excavación del año pasado, se supo el uso que se le dio al elemento por última vez: guarda relación con un rito de cremación, puesto que se hallaron huesos humanos calcinados, así como trozos de una urna de cerámica.
El último uso del dolmen de Gizaburua data, según los expertos, entre 1200-1700 a.c. aunque existen también piezas anteriores a esa fecha.
Ese es el objetivo de la próxima campaña de prospección; conocer, escarbando el fondo del dolmen, el uso anterior que se hizo de él, probablemente entre la época del Neolito (4.500-2.500 a.c) y la Antigua Edad de Bronce (2.000 a.c).
Para poder llevar a cabo dichos trabajos, se necesitan personas voluntarias que puedan ayudar en las labores de excavación de la zona.
Las personas interesadas pueden inscribirse escribiendo a jtapia@aranzadi.eus o llamando al 676 49 01 43 (Jesús Tapia, Sociedad de Ciencias Aranzadi).